Usme, Bogotá – 16 de julio de 2024
Los residentes del barrio El Pedregal en Usme han padecido durante cinco días la falta de agua potable, una situación que ha generado gran indignación y malestar en la comunidad. El problema comenzó abruptamente el jueves 11 de julio de 2024, cuando el suministro de agua fue interrumpido sin previo aviso ni explicación por parte de las autoridades competentes.
Inicialmente, los vecinos creyeron que se trataba de un racionamiento programado, una medida común durante la temporada seca en la ciudad. Sin embargo, al contactar a la Empresa de Acueducto y Alcantarillado de Bogotá (EAAB), les informaron que no había cortes planificados para su zona.
Ante la falta de información y la persistencia del problema, los residentes se vieron obligados a tomar medidas drásticas para almacenar agua durante las pocas horas en que el servicio se restablecía, generalmente durante la madrugada. Esta situación generó una gran incertidumbre y dificultó considerablemente el desarrollo de sus actividades diarias.
La frustración de los vecinos creció aún más al observar el desperdicio de agua potable en las calles, producto de trabajos incompletos realizados por la EAAB. A pesar de las múltiples denuncias realizadas a través de diferentes canales, incluyendo medios de comunicación como CityTV, no se obtuvo una respuesta oportuna ni soluciones efectivas por parte de las autoridades.
Finalmente, tras cinco días de penurias, el servicio de agua potable fue restablecido ayer, 15 de julio de 2024. Sin embargo, la comunidad aún enfrenta problemas como la baja presión del agua, lo que dificulta el desarrollo de tareas básicas como el aseo personal y la preparación de alimentos.
Los residentes del barrio El Pedregal exigen a la EAAB una investigación exhaustiva para determinar las causas de la interrupción del servicio y la implementación de medidas contundentes para evitar que este tipo de situaciones se repitan en el futuro. Además, solicitan la reparación inmediata de las fugas de agua que generan desperdicio y la optimización del suministro para garantizar una presión adecuada en todas las viviendas.
El agua potable es un recurso vital para la vida humana y el desarrollo de las comunidades. Las autoridades responsables del suministro de este servicio tienen la obligación de garantizar su disponibilidad de manera continua y eficiente. La falta de agua potable no solo genera incomodidades e inconvenientes, sino que también representa un riesgo para la salud pública.
Es inaceptable que los residentes de Usme se vean obligados a vivir en estas condiciones precarias por falta de un servicio básico esencial. La EAAB debe actuar con celeridad, transparencia y responsabilidad para atender las justas demandas de la comunidad y garantizar su derecho al acceso a agua potable de calidad.
